¿Crees que sufrir es para mí una vergüenza? Debes saber que es la voluntad del diablo que yo no lleve a cabo de esta manera el plan de salvación». Que a nadie le suban los colores a la cara por los signos de nuestra salvación, tan dignos de veneración y adoración; la cruz de Cristo es fuente de todo bien. Es gracias a ella que vivimos, que somos regenerados y salvados. Llevemos, pues, la cruz como una corona de gloria.